Así es, lo he ido notando cada vez más. No sabía hasta donde llegaba la vida útil de unas zapatillas. Pensaba que al gastarse la suela pero no es así. Mis flamantes Adistar cushion 6 están llegando al fin de su vida.
Más dolores, más cansancio en algunos entrenos pero sobretodo más deformación. El pie no apoya donde debe y me carga el puente en exceso, suerte que ya tengo el relevo en camino.
Paradójicamente en los entrenos de calidad la reducción de la absorción ha hecho una zapatilla más rápida aunque seguramente mis cartilagos ven las estrellas... Espero poder relevar las zapatillas que tendrán ya unos 600km la semana que viene. Por lo que hace a los entrenos, lo dicho, aumento de las molestias pero en general no me puedo quejar :)
Felices fiestas.
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